|
Asma y embarazo
Los mitos siguen impidiendo un tratamiento eficaz. Más de 20,3 millones de estadounidenses padecen asma. El mejor tratamiento para el asma depende de la frecuencia con la que se presentan sus síntomas. Los médicos recetan típicamente corticoides inhalados porque son considerados como el medicamento más eficaz y seguro para controlar el asma.
Los corticoides inhalados no deben confundirse con los esteroides que utilizan algunos atletas y culturistas.
Los esteroides no anabolizantes, como la cortisona, se obtienen con receta médica para el tratamiento de enfermedades como el asma o la artritis y no producen los efectos de las hormonas masculinas de los andrógenos. Los esteroides anabolizantes, de los que abusan algunos deportistas, son hormonas producidas artificialmente equiparables o similares a los andrógenos, las hormonas masculinas del organismo.
A continuación presentamos algunos mitos y hechos sobre los esteroides. Si tiene alguna duda sobre los corticoides inhalados o sobre algún otro medicamento para el tratamiento del asma, consulte a su alergólogo o inmunólogo. Para localizar a un alergólogo o inmunólogo de su zona o recibir información adicional sobre el asma, llame al Servicio de Información y Remisión de Pacientes (Physician Referral and Information Line) de la AAAAI al número (800) 822-2762 o consulte la página web www.aaaai.org.
Mito
Los corticoides inhalados engordan.
Hecho
Sólo el uso prolongado de corticoides orales se asocia al aumento de peso, pero se recetan para tratar episodios agudos de asma o cuando los tratamientos convencionales no funcionan.
Mito
Cuando un paciente comienza a utilizar los corticoides inhalados, los medicamentos terminarán perdiendo eficacia. Por lo tanto, con el tiempo tendrá que tomar cada vez más para controlar los síntomas del asma.
Hecho
Si una persona necesita aumentar la frecuencia de administración de un medicamento, quiere decir que su asma está empeorando, no que el medicamento es menos eficaz.
El objetivo de controlar el asma es lograr un control óptimo de sus síntomas con la dosis mínima efectiva.
Mito
• El tratamiento por inhalación debería emplearse como último recurso, reservado para los casos crónicos o graves.
Hecho
• Según las directrices del Instituto Nacional de Cardiología, Neumología y Hematología estadounidense (NHLBI), los corticoides inhalados constituyen el medicamento más seguro y eficaz que existe para el tratamiento del asma crónico leve o moderado.
Mito
• Los corticoides inhalados son adictivos.
Hecho
• Los corticoides inhalados constituyen el único medicamento que impide que la enfermedad avance, reduzca su gravedad y la controle sin efectos secundarios relevantes. Sin los corticoides inhalados, lo más probable es que la enfermedad empeore y se necesiten más medicamentos en el futuro.
Mito
• Los corticoides inhalados dañan los pulmones.
Hecho
• Los inhaladores suministran el medicamento directamente a los pulmones y constituyen el modo más seguro de administración. Por esta razón la dosis es una pequeña fracción de la presentación oral.
Mito
• Los esteroides inhalados son los mismos medicamentos que utilizan los deportistas para aumentar su musculatura.
Hecho
• Los esteroides como la cortisona son esteroides no anabolizantes, mientras que los que utilizan los deportistas para aumentar su musculatura son anabolizantes.
• Los esteroides anabolizantes son hormonas producidas artificialmente equiparables a los andrógenos, las hormonas masculinas del organismo. El andrógeno más conocido es la testosterona.
• Los esteroides no anabolizantes no producen los mismos efectos que los andrógenos.
Mito
• Debería notarse una mejoría nada más comenzar el tratamiento con corticoides inhalados.
Hecho
• Estos inhaladores tardan más en hacer efecto que los inhaladores de emergencia. Los pacientes comienzan normalmente a sentir los efectos después de una o más semanas.
Mito
• Los corticoides inhalados detienen el crecimiento de los niños.
Hecho
• Aunque podría ralentizarse el crecimiento durante los primeros 6 meses de utilización de corticoides inhalados, la mayor parte de los niños, si no todos, alcanzan la altura prevista de persona adulta.
|
